Lo que me llevó a escribir este artículo fueron todas las mujeres que nos escribieron, muy entusiasmadas con la idea de ayudarnos a expandir nuestra cultura del cuidado femenino a otros territorios y bueno, quiero aprovechar este espacio para agradecerles a ellas y a ustedes por hacer parte de este territorio, llamada Terra Mística.

Gracias por confiar en mí y en esta marca que he creado para ayudarlas a cuidar su piel de una forma consciente y natural. Cada producto lo he probado yo misma y si se los comparto, es porque se mejor que nadie que es bueno para nuestro cuerpo y sobre todo para nuestra salud.

Y bueno, quiero hablares un poco de la expansión y a lo que se refiere exactamente esta palabra, en este territorio de mujeres en donde buscamos expandir nuestros valores, nuestro cuidado y desde luego, nuestra naturaleza femenina. 

Expansión por naturaleza.

Abrirnos, de verdad y con el corazón, es ampliar nuestro conocimiento acerca de nuestro rol cómo mujeres. Para qué y qué hemos venido a hacer por nosotras mismas y por los demás. Nuestra naturaleza femenina es protectora por naturaleza y tiende a cuidar aquello que ama. Para expandir tu naturaleza solo debes aprender a escucharte, a sentirte y a conocerte tanto, que seas capaz de compartirla con los demás.

Expandir nuestra creatividad.

A veces creemos que la creatividad es un don pero en este territorio de mujeres, crear es una disciplina de pensamiento y de acciones que te lleven a expandir tus ideas, pensamientos e intenciones más autenticas y por supuesto, creativas.

Aquí te comparto 3 acciones que pueden ayudarte a expandir tu creatividad.
1. Ordena el desorden antiguo.No solo estás usando tu creatividad lado, pero terminarás con un medio ambiente más limpio y organizado.
2. Modifica tu rutina de baño.Puede ser tan simple como cepillarse los dientes con tu mano no dominante.
3. Inventa un nuevo sándwich.¿Qué ingredientes usarías? ¿Qué harías tú? ¡ponle un nombre!

Expandir la conciencia y el respeto

En este territorio de mujeres, el respeto empieza en nuestro origen, allí donde nace todo, es decir: de los que estamos hechas. Por eso usamos los mejores ingredientes y componentes para obtener productos puros y naturales que no dañen nuestra salud y que sean respetuosas con las mujeres y con el medio ambiente.

Apoyamos las pequeñas granjas de nuestros productos y seleccionamos cada uno de nuestros componentes, asegurándonos que sean 100% puros, orgánicos y libres de pesticidas y derivados del petróleo para cuidar de nuestra salud. Estoy muy satisfecha con cada suero o crema que hemos creado porque además de ser excelente para nuestra piel, es producido con todo el amor y consciencia de estar haciendo lo correcto.

Te invito a reflexionar: tú, ¿de qué estas “hecha”?… ¿cuál es tu origen?… ¿en qué quieres convertirte?

Expansión de lo que es verdaderamente bello.

La belleza exterior es muy importante, desde luego pero en definitiva, es subjetiva. Si bien el arte tradicional establece algunos cánones de belleza, en este territorio de mujeres la belleza dependen de los ojos y la mirada que la analicen. Romper con los patrones de belleza convencionales es difícil, lo sé mejor que nadie porque durante años trabajé en televisión y lo viví más que nadie.

La misma sociedad lleva años vendiéndonos equivocadamente que lo bello es lo perfecto y es por eso, hoy las invito a descubrir otros parámetros de belleza, renovar esta creencia de lo bello y expandir nuestra forma de sentirnos y vernos bellas, para aprender a amarnos tal y cual somos.

Expansión de nuestra energía.

Somos energía pura. A veces nos ha pasado que por razones inexplicables “chocamos” con algunas personas… en Colombia le decimos “mala vibra” o “mala leche” que en mi opinión no es otra cosa que la energía o la frecuencia que esta expandiendo esa persona e incluso, algún lugar o ambiente en el que estemos en determinado momento.

Lo bueno es que la energía transmuta y cambia de un estado a otro. ¿Qué hacer para que esto ocurra?
1. Aprende a diferenciar entre libre albedrío y libertinaje. Escoge siempre el bien por encima del mal.
2. No te desconectes de tu esencia. La formación, los valores y la educación positiva así como de la religión, las doctrinas y filosofías de vida justas y equilibradas.
3. No abuses del alcohol ni uses otros estimulantes, esto te reduce y limita en todos sentido la expansión de tu conciencia.
4. Analiza y reflexiona acerca de tu existencia porque esto te ayudará a descubrir tu propósito el mismo que te permitiría fluir en la vida.
5. Valora tu potencial y el de los demás. No hay nada que levante más tu energía que valorar a los demás.

Expandir nuestra mente.

Pensar, decir y hacer en coherencia, es algo que a veces descuidamos y por eso, mi invitación es a expandir solo pensamientos que seamos capaces de alinear a estas 3 acciones… medita y analiza muy bien acerca de esto porque durante los años que llevo haciendo coaching he visto como algunas personas se van desconectando de si mismas, llevadas únicamente por el deseo y perdiendo el camino de la coherencia. Alinea tu mente con tus palabras y finalmente, toma acción en eso que siempre has querido expandir.

Expandir nuestros valores.

Libertad, amor y honestidad. Esos son 3 de nuestros valores mas importantes en este territorio de mujeres ya que queremos darles la LIBERTAD de elegir la más saludable para su cuerpo, de ser HONESTAS consigo mismas para luego serlo con los demás y de darte mucho AMOR, realizando introspecciones para conectar con la esencia universal y deseando el bien para ti y para los demás.

Y bueno… si pones en práctica todas estas formas de expansión, te aseguro que te volverás un líder por naturaleza, creativa, exploradora, intuitiva y… ¡expansiva!. Anímate y empieza hoy mismos a seguir estos consejos en donde aprenderás a liderar tus decisiones y tu vida en general.

Por último, las invito a seguir nuestro Mapa para Expandir tu Naturaleza, una guía para seguir paso a paso y conocer cuantas formas existen de lograr esa expansión que tanto deseamos para convertirnos en esas mujeres amorosas, honestas y respetuosas que siempre hemos sido.

Un abrazo expansivo,
Cata